martes, 29 de junio de 2010

No manches de sangre la alfombra del salón

Hay dias que humedecen el corazón.
Y notas la sangre goteándote por dentro
como si de una herida de muerte.
Saborear esa humedad
me hace pensar en lágrimas
y en tí.
Lo que en el fondo viene a ser lo mismo.

Cuestión de supervivencia

Dejo todas las noches comida para los gatos callejeros.
Pero creo que son las ratas quienes dejan el plato vacío.

Se vende

Por cese de negocio me vendo en perfecto estado.

martes, 15 de junio de 2010

4:22 a.m

Duermo poco
y sueño demasiado.
Ayer me subí a la azotea
y me puse como un loco a lanzar poemas al viento.
Aunque lo que debería es lanzarme a la calle a buscar
una mujer con la que destrozar mi vida.
Lo detestable de vivir solo
es añorar compañía.

Y la única solución que tengo esta noche es
abrir la ventana de par en par
y dejar que entre el cielo.

Way Out

La poesía dejará de ser una cosa triste
cuando empiece a tener que ver con la vida de la gente,
cuando la gente vuelva a ser la que decida qué hacer
con sus vidas y con las palabras,mientras tanto
todo esto que hacemos seguirá siendo
Literatura.

(Antonio Orihuela)

Necesito una revolución social


Como si los pantalones no fueran los nuestros,
a nadie importa que sigamos
meando contra el viento.
La gente no se entera que hay que lavarse, y no solo el culo,
también la cabeza.
En un país donde solo los ricos tienen permiso
para ser estúpidos.
En un país donde dan consejo
quienes no dan ejemplo
mientras
acecha la tormenta allá en lo oscuro.
Añoro los años en los que se levantaba el puño.

Diagamos que yo sigo creyendo.
Digamos que para mí,
caminar por caminar
no cansa.