lunes, 15 de noviembre de 2010

Autobiografia Nº3

Mi poesia apesta.
Apesta porque
me gusta asi.
Porque hay gente
que leyendo mierda ajena
encuentra la espiral
de sus pecados.
Mi poesia se basa siempre
en que quizás
este pueda ser el último minuto que me quede de vida
y
escribir sea la única forma
de darle una patada en el culo
a la muerte.

Mi poesia apesta y
tal vez nunca consiga
embaucaros.
Pero a veces
no es basura lo que mal huele
sino
el cuerpo corrompido
de esta carroñera humanidad.

Siempre que escribo un poema
me tiro un pedo.
Aunque solo sea por
ayudar un poco
a la inspiración.

1 comentario:

Felipe Marín Álvarez dijo...

Solo un bendito canalla podria escribir poemas como este.