martes, 18 de enero de 2011

Pon a este poema el nombre que quieras

Para cualquier chica que valga la pena.

Ocurre igual
cuando estamos muy quietos en la habitación a oscuras
y podemos sentir cómo el mundo sigue su inercia.

Aquí me tienes ahora
tan solo
que
la sombra es la forma que deja mi cuerpo
en la piel caliente
de tu ausencia.
Esta noche no estás
y
no hay nada mas triste.

Dejemos de estar solos.
Hagamos algo.
Quiero que sientes tu culo en mi cara.

1 comentario:

LatitadeAlmendras dijo...

Este final también me gusta muy, mucho.

Y así empieza mi nombre, sabes?