lunes, 14 de febrero de 2011

Palabras robadas

"Yo a mi manera sigo siendo un niño. ¿Qué hombre no lo es?
Niño que va para maduro, o para viejo; y al que la idea no le disgusta en absoluto."


Drieu La Rochelle: De la novela "Una mujer en su ventana"

2 comentarios:

Jmmlimia dijo...

Me cuesta tanto entender por qué todo el mundo quiere volver a ser joven que a veces, sólo a veces, creo que debo estar perdiendo la razón ... o la memoria. Cómo se equivocó Manrique (cualquier tiempo pasado fue mejor) al hacer arte con ese sentimiento tan vulgarmente penoso.

Pelayo dijo...

La juventud, o la niñez, son etapas que siempre se aprecian cuando ya las has pasado. Quizás, amigo Limia, seas aun tan joven que no te des cuenta de lo que es hacerse mayor. Y eso es bueno. Pero Manrique y los poetas renacentistas no tenían mucha esperanza de vida en el siglo 15. Hacer arte con esa frase, en esa época, tiene su mérito. Pero mas mérito tiene, para mi, cuando son 80 años los vividos como Gil de Biedma, y la experiencia de una larga vida te hace escribir:
"Pero ha pasado el tiempo
y la verdad desagradable asoma:
envejecer, morir,
es el único argumento de la obra."

Seamos jóvenes de espíritu, que para mi es lo importante, aunque nos salgan arrugas hasta en culo.